Yo siempre había pensado que la salsa carbonara era con nata y nada
mas alejado de la realidad. La verdadera carbonara ¡no lleva nata! Os
aseguro que el resultado es increíble y que nunca mas la haré con nata.
En este caso he utilizado FUSILLI LUNGHI de la casa GARAFALO.
Ingredientes:
- 320 g. de FUSILLI LUNGHI
- 80 g. de queso parmesano reggiano o pecorino.
- 100 g. de panceta de cerdo curada.
- 3 yemas de huevos (Yo de mis gallinas)
- 15 g. de aceite de oliva.
- Sal y pimienta negra.
Preparación convencional:
Coloca en una cazuela 1 litro de agua por cada 100 g. de pasta y 15 g. de sal por cada litro de agua. Corta la panceta en tacos regulares y en una sartén con aceite dórala a fuego fuerte hasta que esté completamente crujiente. En un bol bate las yemas con el parmesano rallado, una pizca de sal y la pimienta recién molida.
Escurre la pasta y pásala a la sartén de la panceta. Saltea todo con un poco de agua de la cocción de la pasta y cuando se haya absorbido un poco el líquido, incorpora al bol de las yemas batidas con el queso. Remueve de forma enérgica y sirve enseguida.
Quedan super cremosos y la panceta crujiente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario